| Los dobles mensajes y el espectro de distorsión
En situación normal, se suele entender la COMUNICACION como un simple envío de un mensaje de una persona a otra, en la que un Emisor X comunica a un Receptor Y aquello que quiere comunicar.
Esto tendría validez para esquemas de COMUNICACION muy simples de tipo "abre la puerta" o "coge ese libro". Estas comunicaciones, inicialmente simples e inocuas, pueden ir acompañadas de unos elementos que van más allá de un simple mensaje. Por ejemplo, si el mensaje "coge ese libro" lo dice una madre harta de ver que su hijo es un vago y descuidado para los estudios, el mensaje se convierte en algo más que una mera indicación objetiva.
Un Emisor X comunica un mensaje a un Receptor Y. Pero se transmite lo que X comunica aun sin querer, que es lo que Y oye (Y1) y lo que X pretende comunicar, que es lo que Y también está escuchando (Y2).
A la diferencia de la recepción entre Y1 y Y2 se le denomina ESPECTRO DE DISTORSION.
Efectivamente el EMISOR comunica más de lo que pretende. A menudo, estos mensajes armónicos o paralelos se transmiten mediante canales no verbales como gestos, posturas, tono de voz,... Estos mensajes paralelos pueden distorsionar, negar, e incluso contradecir el mensaje pretendido. Cómo nos gustaría ver la cara de nuestro interlocutor que se encuentra al otro lado del teléfono!. La COMUNICACION será más fidedigna cuanto más pequeña sea la amplitud del espectro de distorsión.
Los filtros que se enumeraban con anterioridad no actúan solamente de selectores de la COMUNICACION, sino que normalmente son moduladores de la misma. Son los que, de una manera gráfica, colorean el mensaje voluntario de tonalidades significativas Y, muy especialmente, la propia imagen. |
